El escarabajo, se encuentra presente en muchas tallas de la cultura egipcia, comúnmente estaban hechas de piedra de basalto negro, piedras verdes (como el jade) o hematita y eran utilizados como amuleto de protección que auguraba un placentero tránsito de la vida a la muerte.
Dentro de las costumbres egipcias, el colocar un escarabajo, sobre los muertos los ayudaba en el proceso de resurrección.
El escarabajo egipcio, era una manifestación simbólica de Creación, Renovación y Renacimiento.
Siendo un amuleto de gran poder, que representaba al Sol naciente, y era símbolo de la resurrección en la mitología egipcia. Además su presencia brinda protección contra el mal, visible o invisible, dando diariamente, un escudo protector.
Tuvo en el antiguo Egipto un papel muy destacado como animal simbólico de protección.
La siguiente historio nos cuenta, que al parecer, los egipcios mantienen la creencia de que esta especie animal carece de hembras, así que cuando el macho quiere engendrar, forma una bola de estiércol con sus patas traseras, durante un recorrido que siempre se dirige del este hacia el oeste, imitando el movimiento del Sol. En la bola deposita su simiente y la entierra durante un tiempo para después desenterrarla y arrojarla al agua. Más tarde, de ella nace un nuevo escarabajo. De ahí la analogía con el hombre que muere y es enterrado para después renacer, tras su paso por las aguas, a una nueva vida.
Come veras, representa el esfuerzo, la concentración y que al final se obtienen frutos positivos, cuando hay constancia y perseverancia.
Se cree que atrae la buena suerte en momentos difíciles y cambios importantes.
Muchas veces se ve representado de color azul, ya que, el color azul produce una sensación de calma y profundidad, a la vez que favorece el espíritu de aventura y el desapego material.
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