Lo primero que debemos hacer es aprender a observar cómo funciona nuestro cuerpo, así poder identificar las dolencias o las molestias previas a una enfermedad. Piensa que eres un vehículo, un ruido, la señal de una luz de emergencia, nos indica que debemos cambiarla para mejorar el funcionamiento del carro.
Nuestro cuerpo es muy sabio, cualquier indicador de malestar es que algo está sucediendo en nuestro interior, y nos avisa. Es ahí donde debemos reflexionar y evaluar muchos factores, el entorno en el cual nos desenvolvemos, como asumimos nuestros problemas y responsabilidades, la alimentación, de qué forma drenamos nuestras cargas emocionales. Debemos aprender a observarnos, siempre he dicho que una persona que no drena, que se afecta por todo, eso enferma, ya que es una toxina dañina para el cuerpo. Por eso que utilizo el termino psicosomático: somático quiere decir “referente al cuerpo” y psico “referente al alma”. La medicina tradicional acepta la idea de que al menos el 75% de las enfermedades son psicosomáticas, es decir, que el mal físico es originado por una causa emocional o mental.
Cuando el cuerpo nos habla a través de un malestar o una enfermedad cualquiera, lo hace para ayudarnos a tomar consciencia de una forma de pensar que no es benéfica para nosotros. Esta forma de pensar, aunque de un modo inconsciente perjudica nos perjudica para decirnos que ha llegado el momento de cambiar esa creencia no benéfica, la cual nos afecta en todos nuestros aspectos físicos, emocionales y mentales.
En las publicaciones siguientes voy a tratar ciertas enfermedades para que reconozca cuáles son sus bloqueos y puedas entonces emprender este viaje maravilloso que te va a dar las herramientas para que seas consciente ya cortar de raíz la enfermedad y así logra un cuerpo sano.
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